El Macalon
por M.A. Garcia Guinea y J.A. San Miguel Ruiz
Se realizó una cata amplia al NW de la C-2,a 25 m. en un nivel más bajo tratando de corroborar
y completar la estratigrafía C-2, sin que tuvieramos la suerte de hallar una secuencia tan
delimitada en niveles como la anteriormente descrita, si bien esta excavación,que llamamos de
las flechas,por las que en ella aparareron ha servido,en unión de la prospección realizada al SE
la llamada C. B.,para completar,creemos bastante claramente lo que fue el ambiente
arqueológico,con sus variaciones desde que se asienta poblacion en El Macalon.Por ello,tanto la
cata de las Flechas que ahora describiremos,como la C-B,cuyo análisis daremos a
continuación,nos ha permitido señalar las líneas evolutivas de las cerámicas y las variaciones y
desaparición de alguna de ellas. Creemos,sinceramente,que El Macalón encierra parte del
misterio de los pueblos levantinos indígenas en su traspaso de una cultura pobre incluida dentro
de tradiciones viejas del bronce,hasta la rápida mediterranización que la haría crear la gran
cultura ibérica.
La cata de las Flechas que, por efectuarse en tierra de cultivo,tuvimos que tapar al finalizar la
excavación nos dió casi un solo nivel,donde aparecieron unos muros poco delimitados en una
extensión de 6,5 m. y un espesor de tierra de unos 65 cm con mucha ceniza y abundantes trozos de
cerámica a mano,gruesa,muy mal cocida,de aspecto primitivo.
Las puntas de flecha.
Estas puntas aparecieron en los lugares marcados en el plano,a una profundidad de unos 13 cm.,es
decir en las primeras primeras capas,en unión del trozo de cerámica de barniz rojo y cerámica
bruñida. Son estas puntas del todo semejantes a las que hallamos en nuestra primera excavación de
El Macalon y del estudio que que de ellas hicimos en nuestra Memoria remito al lector.
Todas ellas estaban en un nivel inmediatamente anterior al núcleo fundamental de vasijas a
mano,pero en contacto ya con este nivel de fondo. A la bibliografia que entonces citamos podemos
añadir la siguiente que hace relación a estas puntas que en España podemos llamar ya tipo
Macalón. Para moldes de estas flechas vease M.A.N.,febrero 1958, p.20. Stronach cita puntas muy
similares aparecidas en el fuerte de Salmansar,en Nimrud,y las flechas en la época de las invasiones
escritas (D. Stronach: Metal objets from the 1957 excavations at Nimrud, Irak,voL XX,part. 2. Autumn
1958 lam.XXXIII,7 y pag 171.Han aparecido algunas en Ampurias sin estratigrafía (vease vitrinas de
ampurias en el Museo de Barcelona).Consultese tambien Rudolf Nauman:Palinuro Ergebnisse der
Ausgrabungen ,I,1958, sobre las excavaciones de Palinuro (Italia), provincia de Salerno,que debió
de tener su vida más intensa hacia la mitad del siglo VI a.d. y que,como Nolpa y Sirino eran centros
indígenas vivían del comercio con los griegos (ver Boll d'Arte,33,1948,339,Rendiconti dell'Acc. Napoli
N.S.,24/25,1949/50,45;Archeologia classica,5,1953,239
Deducciones de la Campaña (1962) Memoria redactada por:M.A. Garcia Guinea y J.A. San Miguel Ruiz
(1962)